Agenda
de teléfono
¿Por
qué los LEPEROS usan solamente la letra 'T' en sus agendas de
teléfono?
Teléfono
de Antonio, teléfono de Joaquín, teléfono de Manuel, etc.
Zapatos
nuevos
Pepe
el lepero fue el martes a la zapatería. Después de probarse unos
cuantos pares, eligió unos italianos, muy elegantes.
Al
entregárselos, el empleado le advirtió: - Señor, este tipo de
zapato suele apretar bastante en los primeros cinco días.
-
No hay problema -respondió Pepe- no los voy a usar hasta el
domingo...
La
fuga
50
leperos presos en un barco-prisión se ahogaron. Habían perforado
un túnel para fugarse.
La
viuda lepera
Se
muere el marido de una lepera y se acerca un amigo a la viuda:
-
Lo siento.
-
No, mejor déjalo acostado...
Los
pollos del lepero
Dos
leperos se encuentran en un camino. Uno de ellos llevaba una bolsa
al hombro.
-
¿Qué tienes en la bolsa? - dice uno.
-
Pollos - responde el otro.
-
Si acierto cuántos llevas, ¿puedo quedarme con uno?
-
Si aciertas, puedes quedarte con los dos.
-
Bueno, pues... ¡cinco!
Un hijo lepero
Un matrimonio de Lepe están discutiendo sobre a quien se parece m ás el hijo pequeño:
- 'Está claro que se parece más a mi, Manolo...'
- ¿Y eso por qué?'-.
-
'Pues porque es mío, no tuyo...'- dice ella.
-
'¡Pero si tampoco es tuyo!'- contesta el lepero.
-
'¡Cómo que no!? ¿Y quién lo parió?'- pregunta ella.
- 'No
sé... ¿Tú te acuerdas el día que nació, estando en la maternidad, que se
cagó y me dijiste que lo cambiara?'.
-
'Sí....'.
-
'Pues.... ¡Lo cambié!'
Lepero
atropellado
A un
lepero lo atropella un autobús, y toda la gente se aglomera alrededor de
él.. El lepero, delirando, dice:
-
'¡Inclínenme, inclínenme!'
Y la
gente lo inclinaba, pero el lepero seguía gritando:
-
'¡Inclínenme, inclínenme!'
La
gente ya no sabía cómo ponerlo, y el lepero dice:
- 'Si
no hay una clínica, hospitalícenme'.
El
pingüino del lepero
Se
encuentran Venancio y Manolo, pero éste último llevaba un pingüino de la
mano, y Venancio le pregunta:
-
'Oye, Manolo, ¿pero qué haces con ese pingüino?'
-
'Pues na, que me lo he encontrao, y no sé qué hacer con él'.
- 'Si
serás bruto, Manolo, ¿por qué no lo has llevao al zoológico?'.
-
'Hombre, pues qué buena idea. Hoy mismo lo llevo al zoológico...'
Al día
siguiente se vuelven a encontrar, pero Manolo sigue con el pingüino, por
lo que Venancio, extrañado, le pregunta:
-
'¿Qué ha pasado contigo, Manolo, no habías dicho que llevarías al
pingüino al zoológico?'.
-
'Hombre, pues lo he llevao, y nos hemos divertido un montón, así que hoy nos
vamos al circo...'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario